lunes, 29 de noviembre de 2010

El cólico del lactante,¿existe?.

La adapatación a la vida fuera del útero no es fácil, y no hay que extrañarse de que durante las primeras semanas los bebés tengan algunos momentos malos.

Muchos bebés lloran sin consuelo al final del día desde la primera semana de vida hasta el tercer mes. Los períodos de llanto son, por lo general, cada día más largos, hasta alcanzar las tres horas en la sexta semana, y decrecen desde este momento hasta el tercer mes. Si el resto del día el pequeño está sano y feliz, no hay que preocuparse.

Sin embargo, hay niños que lloran y parecen muy inquietos durante todo el día. Es como si les doliera algo. En algunos momentos estiran y encogen las piernas, se ponen rojos, tienen el estómago distendido y expulsan gases. Si esos períodos de inquietud duran más de tres horas al día y se repiten más de tres días por semana, se considera cólico del lactante.

¿A qué se debe? Una causa frecuente es la alergia o intolerancia a las proteínas de la leche de vaca. Afecta sobre todo a los níños alimentados con leche de fórmula, pero también hay bebés alimentados al pecho que son sensibles a los lácteos que toma la madre y les llegan a través de la leche. Durante las tomas están incómodos, lloran con rabia, rechazan el pecho o el biberón, tienen hambre, pero no quieren comer. En caso de duda, conviene consultar con el pediatra; si el bebé tuviera alergia, mejoraría con una leche especial o si la madre elimina los lácteos de su dieta.

A veces sucede que no se encuentra una causa para su malestar, entonces hay que tener mucha paciencia durante algunos meses, cogerlo mucho en brazos, acunarlo, dejarlo con una persona tranquila cuando los padres están nerviosos...En fin, decirles, que en aquellas culturas en las que los llevan todo el día pegados al cuerpo de la madre, en un canguro, aunque tengan gases apenas lloran,¡ conclusión?...

sábado, 27 de noviembre de 2010

El sueño. Acudir cuando nos llame.

Cuando un bebé protesta siempre es por algo, aunque nos reclame diez veces en una noche. Puede ser por que le duela le barriguita, porque tenga el pañal sucio,o simplemente porque se despertó en mitad de la noche y se siente solo. Por esta razón no es bueno esperar a ver si se se duerme solo por aburrimiento o por cansancio, pues además no lo entenderá y se sentirá inseguro y abandonado.
Hay que ir a su lado y comprobar que no le pasa nada importante, calmarlo y arroparlo y volver a salir de la habitación sin tener que esperar a que se duerma, para que el niñ@ vaya acostumbrándose a domir por sí mismo.